El Ente Nacional Regulador del Gas publicó el informe “Factura Promedio de Gas Natural Residenciales 2016-2020” en el cual se desprende que la factura residencial debería ser 86% más cara de no ser por el congelamiento impuesto por el Gobierno nacional. La medida regirá por lo menos hasta diciembre.
Dicha emergencia tarifaria “evitó que se aplicaran los aumentos que estaban previstos para abril y octubre del corriente año, con el consecuente encarecimiento del consumo” para usuarios residenciales.
El beneficio alcanza a más de 8,5 millones de usuarios domiciliarios, aseguró el Enargas en el informe
“La medida cobra relevancia particular ya que entre enero 2016 y abril 2019 (última actualización semestral) la factura promedio residencial ya había registrado un aumento del 1.046%, equivalente a unos 1.213 pesos adicionales”, detalló el trabajo.
Así, desde abril -fecha del último incremento- se deberían haber aplicado, de no mediar el congelamiento tarifario, aumentos semestrales en octubre de 2019 con un valor de facturación promedio de $1.841, en abril de 2020 a $2.132 y en octubre actual a $2.471.
De haberse aplicado todos los incrementos, el aumento respecto a enero de 2016 sería de 2.030%, de acuerdo con el Enargas
Además, y de acuerdo con los cuadros tarifarios vigentes entre enero 2016 y octubre 2019, la factura promedio de los usuarios residenciales (todas las subcategorías tarifarias) para un consumo mensual promedio, “siempre registró un incremento superior a la inflación acumulada en cada período”.
Fuente: Ambito