El barril de la variedad WTI subió 2,2% para cerrar en 41 dólares, mientras que el tipo Brent aumentó 1,1% para concluir en 43,30 dólares.
El precio del petróleo se incrementó en medio de los efectos provocados por el huracán Sally sobre las instalaciones del Golfo de México y tras las amenazas del nucleamiento de la OPEP+ de sancionar a aquellos países que no cumplan con los recortes en la producción de crudo.
El barril de la variedad WTI subió 2,2% para cerrar en 41 dólares, mientras que el tipo Brent aumentó 1,1% para concluir en 43,30 dólares, según datos de la agencia Bloomberg.
Los negocios arrancaron la jornada en negativo por las dudas sobre el ritmo de la recuperación económica en los Estados Unidos, tras la difusión de los datos de empleo y de consumo, para luego revertir la tendencia.
La OPEP y sus aliados, entre ellos Rusia, cumplieron en agosto en un 102% el recorte de su producción y amenazaron con sancionar a quienes no cumplan con su cuota, al tiempo que no descartaron bajar aún más sus bombeos, para evitar nuevos desplomes en el precio del crudo.
El ministro de Energía de Arabia Saudita, Abdelaziz bin Salmán, tras copresidir, junto a su homólogo ruso, Alexándr Novak, la reunión mensual de un comité interno de la OPEP+ (OPEP y aliados), dijo: “No esperaremos a diciembre, vamos a ser más proactivos, este mensaje va contra los especuladores del mercado de petróleo, no contra la OPEP+”.
“Cualquiera que piense que recibirá una palabra de mí sobre lo que haremos a continuación, está absolutamente viviendo en la luna… Me aseguraré de que quien apueste en este mercado (petrolero) termine en el infierno”, añadió bin Salmán, en declaraciones que reproduce la agencia de noticias EFE.
La OPEP+ decidió el mayor recorte de la oferta petrolera jamás visto, que fue entre mayo y julio de 9,7 millones de barriles diarios, equivalente al 10% de la producción mundial de “oro negro”, y logró una recuperación parcial de las cotizaciones del barril, que rondan ahora los 40 dólares por barril.
El pacto es un compromiso para mantener limitados los suministros hasta fines de abril de 2021, con un plan escalonado cuya segunda fase entró en vigor el 1 de agosto y supone una moderación de la reducción hasta 7,7 millones de barriles diarios.
“La ligera disminución de los actuales recortes de extracción de petróleo se corresponde con la tendencia del mercado y permitirá evitar la volatilidad”, explicó, por su parte, Novak.
Si bien consideró “que las mayores dificultades vinculadas con la caída de la demanda mundial ya han quedado atrás”, el titular ruso admitió que una segunda ola de la pandemia de la Covid-19 podría exigir recortes de producción adicionales.
Frente a esta situación, destaca “la importancia de ser proactivo y preventivo”, y de que “los países participantes estén dispuestos a tomar las medidas adicionales necesarias cuando sea necesario”.
La reunión de hoy estuvo centrada sobre todo en la disciplina interna y el nivel de cumplimiento de los compromisos.
Aún falta que algunos miembros -como Irak o Nigeria- que en los primeros meses bombearon por encima de su cuota nacional, “compensen” esa diferencia, algo a lo que se habían comprometido hacer hasta fines de septiembre, pero ahora han prolongado ese plazo hasta final de año.
“El cumplimiento pleno no es un acto de caridad. Es una parte integral de nuestro esfuerzo colectivo para maximizar el interés y las ganancias de cada miembro de este grupo”, dijo Bin Salmán.
Finalmente, el oro bajó 1% para cerrar en 1.951 dólares la onza troy.
Fuente: Telam