La norma sería publicada en las próximas horas luego de la reunión que mantuvo el ministro Kulfas con las operadoras y las provincias productoras. La posición de YPF fue clave. Tendría vigencia hasta fin de año pero condicionado al precio internacional.
Luego de la reunión que en la noche del miércoles mantuvieron por medios virtuales el ministro de Desarrollo Productivo de la Nación, Matías Kulfas, con las principales petroleras del país y las provincias productoras, trascendió que es inminente que el presidente de la Nación, Alberto Fernández firme el DNU que fije un Barril Criollo de 45 dólares hasta fin de año.
Según se supo, en el encuentro no todas las empresas estuvieron a favor del precio señalado por Kulfas, quien estuvo acompañado por el subsecretario de Hidrocarburos de la Nación, Juan José Carbajales, en un nuevo encuentro del que no participa el secretario de Estado de Energía, Sergio Lanziani.
Pero la posición de YPF fue trascendental y según se supo, tras el encuentro, el flamante CEO de YPF, Sergio Affronti, destacó que se trata de una importante medida tomada por el gobierno.
La aplicación de un precio sostén para los barriles que se comercialicen en el país tiene un impacto directo en las regalías que perciben las provincias productoras, que apoyaron la iniciativa a pesar de que hace un mes pedían que el precio sea de 54 dólares.
En el caso de las empresas, el precio sostén implica una distribución de la rentabilidad entre el upstream y el dowstream, es decir entre los productores y los pocos refinadores que hay en Argentina, dado que como condición para el precio sostén se mantendrá el congelamiento de los combustibles que hoy están por arriba del precio real del crudo.
Desde Nación se pretendía que la aplicación de este sistema de precio sostén, que ya se aplicó en el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner, no se realice por medio de una imposición o un DNU como es el caso, sino en un acuerdo amplio del sector energético pero no hubo consenso entre los sectores.
Para las provincias, como titulares de los recursos hidrocarburíferos, el reloj marca una cuenta regresiva muy peligrosa, dado que el próximo viernes 15 deberán liquidarse las regalías de abril, un mes que se verá impactado por los cortes de producción y que de no contar con un barril criollo podría forzar a Nación a tener que salir al auxilio de las provincias para pagar sueldos.
Pese a esto, para las empresas, el momento no es el mejor, dado que a raíz de la cuarentena las ventas de combustibles se desplomaron y no sólo son escasas las compras de crudo que realizan las refinerías, sino que también la producción se encuentra reducida.
El plan nacional de estímulo para la industria petrolera contempla quince puntos, como se detalló anteriormente, dado que apunta a la reactivación del sector y a que las empresas garanticen la continuidad laboral y de los contratos vigentes.
Fuente: Rio negro