Economías cerradas, temor al colapso y especulación al extremo comienza ha dejar huella y promete una enseñanza a futuro. El mercado petrolero podría cambiar, definitivamente pos Pandemia.
Los mercados volvieron a vivir una jornada negra. Tan negra como el petróleo. El crudo descendió a mínimos de 18 años y la escasa demanda amenaza de poner a las plantas de almacenamiento al borde del colapso.
Ante la caída de demanda sin precedentes en la historia mundial, desde que el petróleo existe, el precio del barril sigue sin encontrar estabilidad. “Comprar a partir de hechos, vender de acuerdo a los rumores” es lo que parecería ser la nueva forma de comercializar. Para muchos el “volver a la normalidad” que los gobiernos prometen una vez que la infección se supere, tendrá características diferentes. E incluso el rol de los actores podría cambiar.
Pre pandemia, la concentración de poder, en torno al mercado petrolero era clara. La OPEP+ surgió para contrarrestar el crecimiento como potencia productora de Estados unidos y funcionaba.Pero la coronacrisis hizo lo suyo. La ruptura entre Arabia Saudita y Rusia cambió todo.
Con mucho esfuerzo la Organización logro un acuerdo para reducir la producción en 12 millones de barriles de petróleo al día. No bastó. En la previa, las expectativas habían logrado un repunte en los precios. Duró poco. Ayer los mercados se desplomaron, cotizaba, al cierre de esta edición, en torno a los 27 dólares.
Tal como anticipara LOZN, la demanda de crudo sigue sin horizonte cierto de recuperación. Muchos miran ya el 2021. Ponen al 2020 en niveles similares al mundo de hace 10 años atrás. Por eso el recorte anunciado se estima que es, apenas, el tercio de lo que se necesitaría para garantizar un equilibrio entre oferta y demanda y lograr un recupero en los precios. Pero para eso debería haber un acuerdo a escala mundial, de todos los países productores, no sólo los nucleados en la OPEP+. Algo que, por ahora, es muy difícil de alcanzar. Pero aún así, no hay garantías de que “estabilice al mercado” afirmó Ed Moya, de OANDA.
No todos están de acuerdo con que el recorte de producción no alcance. Para el presidente de México, país también integrante de la OPEP+, asegura que la decisión evitó que cayera aún más el precio. “No es automático que el precio del petróleo aumente” afirmó. Consideró que “se tiene que tomar en cuenta que el riesgo que había, era un desplome completo de los precios. Esto es lo que se evitó mínimamente”, sostuvo en conferencia de prensa.
Estados Unidos subió sus inventarios en 19 millones de barriles en la última semana.
Situación de la que no escapa ningún país, incluida la Argentina y la propia Santa Cruz. Hoy los protocolos aplicados ha hecho que la producción se mantenga en el país, con el mínimo de dotación de personal.
De no activarse la demanda, el paso siguiente y natural es parar el bombeo hacia los tanques de almacenamiento. Sin requerimientos externos y la venta del combustible al 20% de lo habitual, la llegada de ese momento es inminente.
Ingresos por el piso
En el plano local, los ingresos de las provincias petroleras caen al mismo ritmo que el precio internacional. El crudo está hoy en niveles del 2002, por debajo de los USD 27,50 el barril en el caso del Brent, (referencia para la Argentina).
El informe de la Agencia Internacional de Energía (AIE) irrumpió al principio de la jornada bursátil y marcó el derrumbe de más del 8% con el que inició la comercialización. Luego se recuperó un poco, pero igual quedó 5% abajo.
En Argentina, el intento de gobernadores y operadoras de que se fije un barril criollo que permitirá sostener los ingresos fracasó. Las decisiones se demoraron. Ayer se depositaron las regalías al valor internacional del crudo, que en marzo promedió los USD32, muy lejos de los 70 de enero o los 58 de febrero.
Esto en la práctica, significó para las arcas provinciales, una merma aproximada de unos 300 millones de pesos. “La caída fue menor, porque nos salvó la primer quincena de marzo”, indicó a La Opinión Zona Norte, un alto funcionario del Gobierno provincial. Pero “abril será calamitoso”.
Son pocas las esperanzas que hay tanto, entre las empresas como las autoridades de que, finalmente, el barril criollo vea la luz. Las diferencias entre las necesidades de las operadoras y el apetito de las refinadoras es el principal escollo.
Las dificultades de caja del Gobierno nacional, tampoco permiten fijar un subsidio, como ocurrió en épocas anteriores por eso se buscó un acuerdo de partes, a cambio de no exigir un retroceso en el precio del combustible.
Este jueves el Presidente y los Gobernadores volverán a reunirse. Si bien la convocatoria es para que haya una expresión conjunta a favor de la renegociación de la deuda, no se descarta que las necesidades económicas de las provincias petroleras, vuelvan a plantearse.
EL PEOR AÑO DE LA HISTORIA PARA EL MERCADO DEL CRUDO
La Agencia Internacional de la Energía (AIE) alertó sobre el peor año de la historia par el mercado del crudo. En su último informe mensual, publicado ayer, la institución aseguro que no hay acuerdo posible que puedan alcanzar los productores, que sea capaz de compensar la caída registrada por la demanda.Según sus estimaciones, el incremento de los inventarios mundiales a un ritmo de 12 millones de barriles diarios, que estiman se está produciendo en el primer trimestre, amenaza con hacer colapsar los sistemas logísticos, al tiempo de que alertan de una caída récord de la demanda de 9,3 millones de barriles diarios, tan solo medio millón de barriles menos de lo pactado por la OPEP+ este fin de semana.
La publicación de dicho informe supuso un auténtico jarro de agua helada para los inversores, y cuando los futuros esbozaban un pequeña recuperación, los datos oficiales sobre la evolución de las reservas almacenadas en Estados Unidos han supuesto una dura bofetada de realidad.
Los inventarios de petróleo en Estados Unidos se incrementaron en 19 millones de barriles. En concreto, según las cifras anunciadas ayer por la Agencia de lnformación para la Energía del Gobierno estadounidense, las existencias de petróleo crudo en el país del Tío Sam se incrementaron en 19,248 millones de barriles durante la pasada semana, que se suman a los 15,177 millones de barriles acumulados durante la semana precedente y los 13,824 de laanterior, además de suponer el mayor incremento de toda la serie histórica.
Este incremento supera con creces los ya de por si elevados 11,676 millones de barriles pronosticados por el consenso de analistas al comienzo de la semana, y sobrepasa incluso los 13,143 millones de barriles avanzados anoche por el Instituto Americano del Petróleo (API). De igual modo, las reservas de productos destilados se incrementaron en 6,28 millones de barriles, un dato muy superior de los 1,437 millones de barriles pronosticados por los expertos, y a los 5,64 millones de barriles apuntada antenoche por la patronal.
En tanto, los inventarios de gasolina se anotaron una subida de 4,914 millones de barriles, por debajo de los 6,386 millones de barriles adelantados por los analistas, pero que sí supera los 2,226 millones de barriles reflejados anoche en las cuentas del API. (Ig.com)
Fuente: La opinion austral