El Gobierno congeló el ajuste de precios a las generadoras de electricidad, que advierten que puede peligrar el abastecimiento del servicio

La puja entre las empresas de generación eléctrica y la Secretaría de Energía parece haber sumado un nuevo round.

El viernes pasado Infobae publicó una carta de la asociación que convoca al 97% de las empresas del sector en donde se le reclamaba al Gobierno que saldara las deudas atrasadas. Dos días más tarde llegó la respuesta: menos ingresos.

En la previa a que se desatara la pandemia del coronavirus y se decretara el congelamiento de las tarifas para los usuarios finales, la empresas generadoras de energía eléctrica habían acordado con el Poder Ejecutivo un modelo de ajuste que tomaba como insumo una fórmula establecida por la inflación minorista y la mayorista.

Pero ahora, con una resolución que tiene fecha del pasado 8 de abril, la Secretaría de Energía dispuso que también se congelará hasta junio cualquier tipo de ajuste en el valor de la generación de energía eléctrica. “Imposible avalar un aumento en estas circunstancias”, señalaron fuentes oficiales.

Por el lado de las empresas a nadie se le escapa que, aunque el momento no es el más adecuado, el problema de los ingresos se va a ir profundizando ya que sumarle a la falta de cobro el congelamiento de la tarifa no hace más que erosionar las arcas de las compañías.

La medida viene en relación a la que se tomó también días atrás pero para la producción de gas. Allí se acordó con las empresas prorrogar los contratos que vencieron el pasado 31 de marzo con los valores establecidos hasta junio, manteniendo el precio vigente y aprovechar esa “ventana” para negociar entre las partes un nuevo valor en medio de un congelamiento de tarifas y una caída de los precios internacionales que complican la producción local.

En el caso de la generación eléctrica la situación es, en algún punto, similar. Así como hoy en el gas la discusión esta puesta entre los sectores que observan que, frente a la caída de precios internacionales, la conveniencia entre producir e importar, en el caso de la energía eléctrica, la recesión y el freno que significó el cierre de muchos comercios hizo que cayera fuerte el consumo de energía.

Pero mientras se discute sobre qué valor pagar, las generadoras también están discutiendo sobre las deudas no pagadas. La semana pasada la Asociación de Generadoras de Energía Eléctrica de la Argentina (Ageera) le envió una carta al secretario de Energía de la Nación, Sergio Lanziani, en donde le señala que el sector está al borde del quiebre de la cadena de pagos, algo que podría poner en riesgo el abastecimiento normal de la energía.

La situación parece estar al límite, por lo menos así lo entiende un operador del mercado: “Los pagos se van reduciendo. La situación de las distribuidoras es delicada porque están empezando a cobrar menos de sus clientes, entonces le pagan menos a Cammesa y ésta le paga menos a las generadoras. Todavía no está rota la cadena pero es una situación muy compleja”.

“Este escenario puede afectar al normal abastecimiento. Lo que vemos es que empezó el círculo vicioso que puede terminar en que Cammesa deje de pagar en algún momento y, si eso sucede, el Tesoro debería auxiliar a Cammesa”, explicaban.

Claramente la relación entre las empresas y la secretaría de Energía no es la mejor. Por lo menos así lo deja ver la carta de Ageera, los dichos de los empresarios y la respuesta que está preparando el Ejecutivo.

Según pudo reconstruirInfobae, la Secretaría de Energía está estudiando penalizar a las generadoras de energía que no cumplan con sus contratos de envíos. “Estamos viendo no pagarle a la que no despacha. Hay algunas generadoras de energía que no están enviando a la red todo lo que tienen que enviar,por eso estamos viendo de pagar menos por el valor de la electricidad”.