En vísperas del inicio de la cumbre de la OPEP y sus aliados, Arabia Saudí eleva el pulso al proponer un recorte de producción superior incluso al millón de barriles diarios para aliar los efectos del coronavirus.
La globalización de las alertas sobre el impacto del coronavirus aumenta a marchas forzadas la determinación de la OPEP y de aliados como Rusia de aplicar un contundente recorte adicional de producción.
En semanas anteriores la magnitud del recorte barajado por la propia OPEP rondaba los 600.000 barriles diarios. En las jornadas anteriores el mercado ya anticipó una rebaja próxima al millón de barriles diarios. En las últimas horas, a falta sólo de un día para el inicio de la cumbre que se celebrará en Viena, Arabia Saudí presiona para elevar este recorte por encima incluso del millón de barriles diarios, según informa la agencia Bloomberg.
La presión de Arabia Saudí, líder de facto de la OPEP, compromete la posición de otros países de la organización petrolera más reticentes a adoptar un recorte adicional tan pronunciado en sus cifras de producción en un contexto de continua pérdida de cuota de mercado debido al auge del ‘shale oil’.
El desplome de hasta el 16% que registró el petróleo durante la semana pasada, su mayor desplome semanal desde el estallido de la crisis financiera en 2008, ha endurecido la posición de Arabia Saudí de cara a la cumbre de la OPEP.
La posibilidad de que el viernes la cumbre de la OPEP acuerde un recorte de producción superior a lo esperado contribuye a afianzar la remontada del precio del petróleo.
Las subidas en la jornada de hoy superan por momentos el 2%. El barril de Brent roza en sus máximos intradía los 53 dólares, frente a los 49 dólares que registró la semana pasada.
La cotización del barril tipo West Texas, de referencia en EEUU, remonta hasta rozar los 48 dólares.
Fuente: Expancion