Así lo afirman estadísticas de la Secretaría de Energía. La caída de las naftas fue ocasionada básicamente por el descenso en la demanda del combustible premium (-14,2%), mientras que el producto súper registró una suba interanual de 3,52%.
En tanto, la suma del gasoil y el diesel oil exhibió, por la tracción del primero, un incremento interanual del 4,13%.
Analistas del sector destacaron este repunte, dado el marco de vicisitudes registradas a fines del 2019, en particular el congelamiento de los precios entre el 9 de agosto y el 13 de noviembre 2019, y la posterior falta de abastecimiento por parte de algunas de las empresas petroleras.
En diciembre se observó un aumento general del consumo de combustible, del 4,83%, frente a doce meses atrás.
Se destacaron especialmente los incrementos en la demanda del gasoil y el diesel oil, 11,91% y 6,93% respectivamente, si bien esas alzas reflejaron los muy magros volúmenes de fines de 2018.
En el caso de las naftas, la estadística oficial muestra que la suba fue más moderada, mientras se destacó el repunte de la premium (0,37%).
La demanda del último mes de 2019 frente a noviembre mostró el paulatino retorno de los combustibles premium (diesel oil y nafta mayor de 95 octanos), con aumentos del 9,08% y 14,68%, respectivamente.
Por su parte, la nafta súper, más allá de la migración a premium, también mantiene un sostenido incremento motivado por la estabilidad post eleccionaria y la mayor circulación de autos en vísperas de fin de año.
Fuente: Ambito