El economista que renegoció la deuda pública con Néstor Kirchner ahora tendrá la misión de traer dólares para revertir la histórica restricción externa.
El economista Guillermo Nielsen será el presidente de la petrolera estatal YPF, según lo anunció este viernes el presidente electo, Alberto Fernández, sobre el final de la conferencia de prensa en la que presentó a su gabinete y otros de quienes serán sus principales colaboradores.
Nielsen va a ser el encargado, entonces, de imprimir a YPF un perfil lo más independiente posible de la Casa Rosada y blindar a la formación Vaca Muerta de los constantes giros de las políticas económicas.
Desde hacía varios meses el nuevo presidente de YPF, que reemplazará a Miguel Gutiérrez, venía trabajando en un proyecto para blindar Vaca Muerta y convertir a la política energética en una política de Estado.
Eso será clave para atraer inversiones en petróleo y gas en los próximos años. Según distintos estudios, hasta 2023 pueden llegar desembolsos de petroleras nacionales y extranjeras por unos u$s 27.000 millones.
El ex secretario de Finanzas (2002-2005) desmintió recientemente ser el autor de un proyecto para asegurar contratos de licuefacción de gas.
Sin embargo, en los últimos meses se acercó a casi todas las empresas energéticas para tender relaciones.
Su nombre sonó también como ministro de Economía, encargado de renegociar la deuda externa, y también como secretario de Energía.
En YPF además tendrá la tarea de hacer repuntar los balances. La petrolera estatal de gestión privada perdió en los primeros nueve meses del año más de $ 23.000 millones.
La deuda de la empresa no es un problema por el momento, ya que no debe afrontar grandes vencimientos en 2020. Pero si el mercado voluntario de deuda se mantuviera cerrado para Argentina y sus empresas, en 2021 YPF deberá usar caja para pagar sus vencimientos y reducir inversiones.
Al lado de Nielsen estaría Juan Garoby, cofundador y actual Chief Operating Officer (COO) de Vista Oil & Gas, la petrolera que creó Miguel Galuccio.
Garoby sería el hombre que pondría la vicepresidente electa, Cristina Kirchner, en la empresa estatal.
Fuente: Cronista