El gas y el petróleo de Vaca Muerta toman un rol preponderante en el informe Escenarios Energéticos trazado por Nación. Las obras de gas podrían demandar 8600 millones de dólares.
La continuidad de la senda de crecimiento de la producción de gas de Vaca Muerta está condicionada a la expansión de la demanda y al incremento de la capacidad de transporte y obras de infraestructura para competir en los mercados globales del GNL.
Según el informe Escenarios Energéticos 2030, publicado esta semana por la Secretaría de Energía de la Nación, en la próxima década se necesitarán inversiones en infraestructura de transporte que oscilarán entre los 6 mil y los 8600 millones de dólares, dependiendo del nivel de desarrollo que alcance el shale, lo cual básicamente estará atado -entre otros factores- a los precios de los hidrocarburos.
Para el caso de la ampliación en la capacidad de transporte de gas, las inversiones deberán oscilar entre un mínimo de 5200 millones de dólares y un máximo de 7800 millones para incorporar una capacidad de entre 84 y 125 millones de metros cúbicos por día.
Entre las obras contempladas en el informe, se destaca un gasoducto troncal con características similares al proyecto Tratayén-Salliqueló-San Nicolás, que debía entrar en operación total en 2023. También se requerirán ampliaciones en el gasoducto Centro-Oeste para abastecer a las regiones Centro, Litoral y Gran Buenos Aires. Además, se prevé la reversión de los flujos de los gasoductos en la región Noroeste a partir del 2026 y la promoción de la competencia de la producción de gas local con la cuenca de Bolivia.
Por otro lado, se considera que a futuro será necesario incrementar la capacidad de transporte hacia Bahía Blanca, para abastecer a las terminales de licuefacción para la exportación de GNL, así como también reversiones parciales del gasoducto Norte.
Las necesidades de incorporación de capacidad en la Cuenca Neuquina para evacuar mayor producción desde Vaca Muerta están en línea con las proyecciones de producción.
En el escenario de máxima, se necesitarán transportar alrededor de 180 MMm3/día, mientras que, para el escenario con menor producción de gas, las capacidades de los gasoductos rondan los 150 MMm3/día. En ese escenario, será necesario al menos duplicar las capacidades actuales, luego de que los desembolsos considerados para la instalación de las plantas de licuefacción para la exportación de GNL ascenderán aproximadamente a los 5625 millones de dólares.
Fuente: Lmneuquen