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La decisión de fijar los precios internos del combustible se había anunciado el 14 de agosto, tras la derrota del oficialismo en las PASO, y se iba a extender por 90 días; tras la suba del precio internacional del barril de petróleo, se puso fin apenas un mes después; también sube un 5,58% del preci

El congelamiento del precio de las naftas duró un mes. Luego de que el valor internacional del barril de petróleo se disparara en los últimos días por el ataque a dos terminales petroleras en Arabia Saudita, y que esto provocara una brecha mayor con el precio del barril criollo, el Gobierno autorizó un aumento del 4% en los surtidores, que comenzará a regir a partir de hoy a la medianoche.

Este incremento, sin embargo, no compensa los valores actuales del mercado. Según admite la Secretaría de Energía, los precios de las naftas todavía están atrasados un 15%, pero -dijeron- no habrán más incrementos hasta el 12 de noviembre, día que finaliza el congelamiento establecido por 90 días. Por lo menos si el tipo de cambio se mantiene estable y el valor internacional del petróleo se estabiliza.

Ese fue el motivo principal para romper con lo dispuesto, ya que el precio del barril, que cotiza en el índice Brent, pasó de US$60 el viernes pasado a un pico de US$68 en pocos días, aunque hoy cerró a US$63,57. Esto equivale a un aumento final de 6%.

Gustavo Lopetegui, secretario de Energía de la Nación
Gustavo Lopetegui, secretario de Energía de la Nación Fuente: LA NACION – Crédito: Silvana Colombo

El miedo principal para el Gobierno radicaba en que se produjera una situación de desabastecimiento por las diferencias de precios entre los valores de surtidor y los que se comercializan en el mercado mayorista, en el cual operan las estaciones sin marca, el campo y algunas industrias. Al estar solo congelados los valores del surtidor, estos sectores se estaban volcando a comprar el combustible en estaciones de servicio en vez de comprarle directo a las petroleras, como suelen hacer.

No permitir un incremento en las naftas también era un incentivo para que los ciudadanos de países limítrofes vinieran a la Argentina a cargar combustible (en la ciudades fronterizas).

A pesar del aumento autorizado, el Gobierno todavía mantiene el congelamiento por decreto de necesidad de urgencia (DNU). Las dos principales variables que las empresas toman como referencia para formar sus precios están fijadas, aunque ayer se permitió un aumento en el tipo de cambio, que pasó de $45,19 a $49,30, aun por abajo de los $59,52 que cerró hoy el dólar mayorista.

El valor del barril criollo, en tanto, se mantiene en US$59, también menor a los US$63,57 que cerró ayer.

El Gobierno suspendió además los subsidios que le iba a transferir a las provincias y a las petroleras para que el tipo de cambio subiera, en su momento, de $45,19 a $49,50, ya que ninguna aceptó la condición que imponía la Secretaría de Energía: que renuncien a cualquier demanda judicial contra el Estado.

Las provincias de Neuquén y Río Negro y la empresa Vista Oil, por caso, mantienen al momento reclamos ante la Justicia por el congelamiento. Las provincias se ven afectadas por la menor recaudación por regalías, de las cuales cobran aproximadamente un 12% del valor del barril que las productoras le venden a las refinerías.

“El precio efectivo del barril que recibían los productores antes del congelamiento era US$50,50, ya que al valor del Brent [que era US$59 en ese momento] hay que restarle lo que pagarían de retenciones si exportaran y el descuento por calidad. Después de que se publicara el decreto, el valor efectivo pasó a US$41,20. Ahora, con los aumentos autorizados, está en US$45 por barril. Todavía están atrasados un 20% a su valor real, que equivale a un 15% de atraso en los surtidores”, explicó Gustavo Lopetegui, secretario de Energía.

Con el incremento del 4%, el Gobierno además de considerar que no aumenten los impuestos a los combustibles, y de mantener el margen que tienen las refinerías, permitió una suba implícita de los tres tipos de biocombustibles, que se actualizarán 6% a partir de octubre.

El último aumento en el precio de las naftas en el mercado local se había concretado en los primeros días de julio. Tras ese ajuste, el quinto del año, los valores de referencia en la ciudad de Buenos Aires de YPF, la firma que concentra la mayor participación en el mercado, eran de $43,71 para la nafta súper; $50,43 para la premium (subieron 2,5%); y $40,94 y $47,92 para los combustibles diésel e Infinia diésel (aumentaron 1,75%). Desde entonces, la inflación acumulada a nivel nacional supera el 6%.

Las compañías, al momento, no confirmaron el ajuste que aplicarán en sus precios. Si se proyecta el 4% autorizado por el Gobierno, el litro de nafta súper pasaría a $45,49, mientras que el litro de nafta premium tendría un precio de $52,45. En tanto, los valores del gasoil en sus dos versiones pasarían a $42,58 y $49,84, respectivamente.

Por: Sofía Diamante
Fuente: Lanacion