Test Drive Volkswagen T-Cross Highline Hero

Llegó a nuestras manos el primer B-SUV de la marca alemana desarrollado sobre la plataforma MQB-A0. Probamos la versión tope de gama Highline Hero que se caracteriza por su carrocería bitono. Está equipado con el impulsor naftero 1.6 MSI de 110 CV con caja automática de 6 velocidades y una importante dotación tecnológica y de seguridad.

a espera se hizo larga y algunos nunca pensaron que llegaría el día. No estamos hablando del estreno de una película de superhéroes ni tampoco del disco de una banda famosa. Aunque sabemos que quizás sea una exageración, nos referimos al definitivo ingreso de la marca Volkswagen al segmento de los SUV compactos, el más competitivo de la actualidad para el mercado automotor argentino.

El ansiado T-Cross se lanzó en el país hace unos meses, más precisamente en junio, en el Estadio Obras de Buenos Aires, con más de 500 invitados, en el marco que merecía en su carácter de lanzamiento del año.  Con bombos y platillos lo presentaron esgrimiendo los argumentos con los que le piensa dar pelea a productos consagrados como Ford Ecosport (el inventor de esta categoría), Peugeot 2008, Chevrolet Tracker, Honda HR-V, Renault Captur, entre otros.

Si bien desde hace unos años se comercializa en Europa, el estreno en la región llega desde Brasil, donde se produce bajo la misma plataforma MQB-AO del Polo y el Virtus, con quienes también comparte mecánica y algunos componentes.
La preventa oficial fue exitosa (se agotaron las 500 unidades que se pusieron a la venta) y los primeros meses de comercialización, a pesar de la crisis, se dieron dentro de lo previsto. Se ofrece en cinco versiones, con una sola motorización naftera 1,6 y dos cajas: manual de cinco velocidades y automática de sexta. Nosotros probamos la opción Highline con el paquete Hero que adiciona agregados interesantes.

El T-Cross ya genera buenas reacciones en cuanto a su estética, quienes se subieron elogian su habitabilidad y lo han premiado por el nivel de seguridad que ofrece. Sabemos, por lo que pudimos ir anticipándoles en notas anteriores, que tampoco se queda atrás en tecnología. Pero nunca nos gustó hacer juicios apresurados. Queremos manejarlo, revisarlo atentamente por dentro y por fuera, sentir su andar, contemplar su funcionamiento, probar sus sistemas y verificar el confort que ofrece.

Diseño Exterior:
Las novedades suelen causar atención, sorpresa y admiración. Con los nuevos autos que aparecen en nuestras calles sucede lo mismo, y mucho más si se trata de un diseño nuevo que no se parece a otros modelos de la marca. Así ocurre con el T-Cross, que llama la atención por su personalidad y originalidad. Quizá porque es el primer SUV compacto de Volkswagen o también por su silueta proporcionada y los detalles que le proporcionan calidad superior.

Provoca aceptación entre el público, en esa reacción que tienen las personas al ver un auto. Si se dan vuelta para mirarlo y sostienen unos segundos la mirada quiere decir que les gustó. Eso nos pasó con este nuevo modelo de Volkswagen. Las dimensiones que lo definen como un vehículo equilibrado están compuestas por 4.208 mm de largo, 1.760 mm de ancho y 1.568 mm de altura. En esta configuración muestra rasgos también de monovolumen.

No hay formas cuadradas ni clásicas, los trazos, ángulos y líneas transmiten dinamismo. El signo más distintivo es su parrilla, que presenta algunos detalles cromados al igual que su contorno. A su vez, se destacan sus delgados faros full led y los antiniebla con bordes cromados. En la parte inferior exhibe una gran toma aire.

Las llantas de 17” presentan un formato que denota movimiento a través de cinco rayos dobles de formato irregular que se realzan con el fondo oscurecido que presenta. Otro punto destacado son los rieles de techo símil aluminio. Por otro lado, todas las zonas bajas están protegidas por superficies en plástico negro que también forman parte de los guardabarros.

El sector trasero muestra personalidad con sus exclusivas luces que conforman una sola unidad ya que se unen por intermedio de una barra que atraviesa el ancho del portón trasero. La zona se complementa con el spoiler negro, la luneta de reducidas dimensiones y su gran paragolpes gris.

Diseño Interior:
A nuestro parecer, el interior nos sorprendió más que el exterior, por su calidad general, la habitabilidad, su nivel de insonorización y la tecnología aplicada al confort y la conectividad. El estilo del habitáculo muestra modernidad y distinción. Predominan los tonos negros y grises, combinados con algunas inserciones y los delicados tapizados de eco cuero bitono. Quizá esperábamos algunos detalles para esta versión tope de gama, como algún inyectado o una zona en piano black, todo contrastado por el color de la carrocería.

Cuando lo probamos no nos costó demasiado encontrar una cómoda postura de manejo, porque la butaca es mullida y tiene buenas sujeciones. Además, las regulaciones (incluida la lumbar) le permiten encontrar la mejor posición y el volante multifunción se ajusta en altura y profundidad.

Las plazas traseras son cómodas como las delanteras; tres adultos pueden viajar cómodamente. Hay espacios hacia los costados y también cuentan con una buena distancia desde las cabezas hacia el techo. Tiene la misma distancia entre ejes que el Virtus: 2,65 metros. La regulación en altura de la butaca del conductor es amplia alcanzando los 8 cm entre la posición más baja y la más alta, mientras en las plazas traseras si consideramos un conductor de 1,75 m de altura y un pasajero de la misma talla, la distancia de las rodillas al respaldo de las butacas delanteras es de 21 cm y 7 cm al techo, a pesar que el techo acristalado le saca algún centímetro.

La plancha de abordo es el corazón de un habitáculo, si está bien resuelto define prácticamente la aceptación de todo el conjunto. En el T-Cross no hay fisuras, pues parece de una categoría superior, y se percibe un claro objetivo de simplificar las funciones para mantener un equilibrio estético.

En lo más alto se encuentra el soporte para ubicar el celular, luego continúa la pantalla Discover Media de 8” (hablaremos de ella en el apartado de equipamiento). Más abajo aparecen los comandos del climatizador de una sola zona: solo dos perillas y cuatro botones. Ya sobre la base se encuentran el botón de encendido y la palanca de la caja automática.

La capacidad del baúl es lógica para su segmento, con 373 litros, pero puede ampliarse a los 420 litros a través de una práctica solución: se bajan unos ganchos (que están escondidos en los respaldos traseros) corriendo los asientos unos centímetros hacia adelante. De esta manera aumentará el espacio de carga, pero los respaldos estarán más rectos y pueden complicar el confort. El baúl tiene piso variable, con lo cual brinda más opciones para distribuir el equipaje o cualquier objeto. La mala noticia es que por debajo aloja una rueda de auxilio temporal en medida 195/65 R15. Si bien no es de las más delgadas, permite circular hasta 80 km/h.

Instrumental:

Instrumental:
El tablero de instrumentos es de los más avanzados que podemos encontrar en Argentina y ya lo habíamos conocido en otros modelos de Volkswagen. Estamos hablando del Active Info Display, 100 % digital, que permite configurar la información a la vista del conductor. Es muy completo y claro para la visualización del conductor. Pero hay que tener cuidado porque tanta información termina abrumando.

La configuración original muestra dos grandes cuadrantes circulares para el velocímetro y el tacómetro, y en el medio se localiza una gran superficie para el display donde podemos encontrar múltiples informaciones. En los costados, sobre la izquierda, una línea marca la temperatura del líquido refrigerante, y a la derecha, otro para el indicar del nivel de combustible. Sin embrago puede configurarse como vemos en las fotografía de múltiples manera a gusto del conductor

Brinda muchas variantes para definir el tablero, incluso permite mostrar el display completo con el mapa de navegación del GPS. Medimos el error de velocímetro, es así que a 80 km/h el real es de 78 y así sucesivamente cuando marca 100 km/h es de 98; 120 km/h es de 118 y finalmente a 130 km/h es de 127 dando un error promedio de 1,9%.

Equipamiento:
En primer término, citaremos lo que nos resulta más destacado teniendo en cuenta su segmento y lo que traen sus rivales. Por eso vale la pena mencionar que tiene un sistema de apertura de puertas y arranque del motor sin llaves.

El modelo dispone de Control de Velocidad Crucero, un aliado interesante de la caja automática especialmente para disfrutar en ruta. Por otro lado, incluye un climatizador digital de una zona. Nos sorprendió ya que varios exponentes de su categoría permiten que conductor y acompañante seleccionen su temperatura individualmente. Por otra parte cuenta con toberas de salida de airea en la parte trasera.

La pantalla táctil Discover Media de 6,5” es rápida, intuitiva y fácil de operar. Muestra la info de la computadora de abordo, configura el audio (con cuatro altavoces) y la climatización, proyecta las imágenes de la cámara de visión trasera y el GPS. Además, a través de Mirror Link permite espejar aplicaciones en Android Auto y Apple Car Play.

Entre las asistencias a la conducción más importantes que presenta, destacamos los sensores de estacionamiento delanteros y traseros complementados por la cámara de visión posterior. A su vez, también cuenta con sensores crepusculares (detecta y activa las luces cuando es necesario) y de lluvia (pone en funcionamiento los limpiaparabrisas cuando percibe la presencia de gotas).

Los espejos retrovisores se repliegan de forma automática y el espejo interior tiene la función antiencandilamiento que tan bien nos viene cuando manejamos en ruta de noche.

El paquete Hero suma elementos de categorías superiores como el sistema automático de estacionamiento que busca lugares para estacionar y realiza la maniobra por nosotros. Además, adiciona el techo panorámico doble corredizo y eléctrico que le proporciona gran luminosidad y jerarquía.

Seguridad:
Los antecedentes del T-Cross en términos de protección son inmejorables. Antes de que se comenzara a comercializar, el Latin NCAP, organismo que evalúa a seguridad de los autos que se venden en América Latina, lo ensayó mediante diferentes crash test de alta velocidad. Los resultados determinaron que este SUV compacto obtuvo cinco estrellas tanto en protección de adultos como niños.

El modelo proviene de fábrica con seis airbags (frontales, laterales delanteros y de cortina para ambas plazas), Sistema Antibloqueo ABS con Distribución Electrónica de Fuerzas de Frenado (EBD), Control de Estabilidad (ESP) y Asistente al Arranque en Pendientes de serie.

Las cinco plazas disponen de cinturones de seguridad inerciales de tres puntos y sus respectivos apoyacabezas, fundamentales para resguradar las cabezas y los cuellos en caso de que se produzcan los severos impactos por alcance. Además, dispone de anclajes Isofix para sillas de seguridad infantiles.

Otro dispositivo importante es el sistema de frenado automático, que detiene al auto de forma paulatina tras un choque. Tiene como objetivo evitar que se produzcan más colisiones luego del impacto.

La versión Highline que probamos adiciona dos sistemas importantes: el detector de fatiga del conductor (detecta si estás cansado y te recomienda que pares de manejar) y el control de presión de los neumáticos, que percibe si alguna rueda está pinchada o desinflada.

Los faros antiniebla cornering light permiten ver a  cada lado para iluminar las curvas y otras zonas complicadas. Es ideal para esas noches cerradas o con mucha presencia de niebla en el camino. A pesar de ofrecer un completo equipamiento, también encontramos algunos faltantes que para nosotros son de consideración como el faro antiniebla trasero y los frenos a disco traseros (son a tambor en todas las versiones).

Motor, transmisión y equipamiento:
Una sola motorización es la que esta presente en este modelo en Argentina, ya conocido por nosotros, que es el mismo que utilizan Polo y Virtus. Un naftero MSi 1.6 de 16 válvulas, que entrega 110 CV de potencia y un torque máximo de 155 Nm, combinado, en este caso que probamos, con una transmisión automática Tiptronic de seis marchas, que incluye levas en el el volante.

El propulsor es silencioso, progresivo y austero,  y rendidor para utilizar en ciudad. Cuando pasamos a la ruta nos damos cuenta que le vendrían muy bien unos caballos extra, sobre todo cuando intentamos realizar un sobrepaso. Es que son casi 1.300 kilos para mover.

Muchos reclaman que Volkswagen traiga el 1.4 turbo de 150 CV que tienen los T-Cross en Brasil. Con esta motorización, las sensaciones serían bien diferentes. Se estima que arribará al país aunque no hay fecha confirmada.

La caja es impecable, muestra un gran desempeño, con pasajes de marcha rápidos, pero no puede hacer milagros con un motor racional y a pesar de que presenta un modo S (Sport).

En las pruebas de aceleración los valores fueron modestos siendo el mejor el de 12,67 para alcanzar los 100 km/h partiendo de 0. Por otra parte en los ensayos de reprise o sobrepaso de 80 a 120 km/h fueron necesarios 10,2 segundos. En términos de consumo a 100 km/h fue de 5,4 l/100 km cuando el cuentavueltas mostraba 2.100 rpm, muy buen valor que con un tanque de 50 litros nos permite recorrer 925 kilómetros sin reabastecernos. En la ciudad se elevó a 10,3 l/100 km y ahí la autonomía se reduce a 495 kilómetros.

Los otros componentes del conjunto mecánico no nos defraudaron, porque las suspensiones (delantera independiente y trasera a eje de torsión) son equilibradas, disimulan las irregularidades para que no se trasladen al habitáculo, y copian el asfalto cuando vamos en autopistas o rutas. Vale la pena destacar que ambas cuentan con resortes helicoidales y amortiguadores telescópicos.

El T-Cross viene equipado con neumáticos Bridgestone Turanza, cuya característica fundamental es la de favorecer a una conducción suave y silenciosa, tanto en piso mojado como seco. Los comentarios de los clientes señalan que estos productos eliminan ruidos y vibraciones.

En el paso por las calles y terrenos desparejos se beneficia por su despeje al suelo de 200 milímetros porque evita el contacto con cunetas, lomos de burro y hasta algunos pozos.

El T-Cross es un auto ágil, fácil de manejar, con buena maniobrabilidad gracias a la docilidad que exhibe su dirección, con un volante de buen grip. Por otra parte, y como ya dijimos en el apartado de seguridad, lamentamos que los frenos traseros sean a campana, aunque tenemos que decir obtuvo 39,4 metros para detenerse cuando circulábamos a 100 km/h y nos parábamos sobre el freno.

Precios:
La página oficial de Volkswagen indica que los precios del T-Cross vigentes a septiembre parten de $1.028.800 de la versión Trendline Manual a $1.601.150 de la opción Highline Tiptronic Hero, que probamos en esta oportunidad. Toda la gama tiene una garantía de 3 años o 100.000 kilómetros.

Entre sus competidores encontramos al referente de la categoría como es la Ecosport. La variante Storm, con motor 2.0 y tracción, ubicada en lo más alto de la gama del modelo que inventó este segmento, cuesta $1.563.100. Para tener más referencias, podemos citar a otros referentes que compiten con T-Cross, como el Renault Duster (Privilege 2.0 4×4 a $1.181.200) o el Jeep Renegade Trailhawk 4×4 AT ($1.918.800).

A continuación detallamos el cuadro con prestaciones y consumos:

Conclusiones:

Fuente: 16valvulas