Congeló los contratos en dólares al tipo de cambio previo a las PASO, como hizo el Gobierno
Sin definiciones concretas en el Gobierno sobre cómo sería la salida de la medida que fija el precio de los combustibles, YPF anunció ayer que congelaba también los contratos en dólares con sus proveedores al tipo de cambio anterior a las PASO: $45,19 por dólar.
“Estas medidas son de carácter extraordinario, revisables ante cualquier iniciativa oficial que implique una adecuación de los precios de los combustibles, que tiene como única finalidad mantener operaciones financieramente sostenibles y, a través de un esfuerzo compartido, un trato equitativo entre toda la cadena de abastecimiento mientras esté vigente el congelamiento de precios”, dijo la petrolera a través de un comunicado.
El CEO de YPF, Daniel González, les había admitido a sus accionistas que la medida de congelar los precios le costaría a la empresa hasta US$120 millones por mes y que recortarían sus inversiones en una cantidad similar al impacto.
“Todo contrato que tenga un componente en dólares queda congelado al mismo tipo de cambio que nos fijaron. Cuando se solucione la medida, se descongela. Estamos tratando de tomar las decisiones más adecuadas para el negocio. Otras empresas frenan equipos, nosotros buscamos una solución que no afecte ni el nivel de actividad ni el empleo”, señalaron en la compañía.
Luego de la devaluación de 20% en promedio que tuvo la moneda tras las elecciones primarias, YPF propuso en la Secretaría de Energía un incremento de los combustibles del orden del 4,5%, pero la decisión en el ala política del Gobierno fue aplicar un congelamiento total por lo menos hasta el 14 de noviembre.
Alrededor del 80% de los ingresos de YPF provienen de la venta de combustibles, ya que tiene casi el 60% de la participación de mercado de estaciones de servicio, entre la marca propia y terceros. “Nos congelaron los ingresos, pero los egresos se multiplicaron por la devaluación”, explicaron en la empresa.
La otra parte de los ingresos de YPF está vinculada a la venta de gas, que sufrió también la baja de precios tras la sobreoferta que se produjo por el aumento en la producción en Vaca Muerta.
Entre las empresas que ofrecen servicios de perforación, como Schlumberger, Halliburton, San Antonio o Pecom, no quisieron hacer comentarios al momento.
En las estaciones de servicio, por otro lado, se sigue de cerca el tema del abastecimiento de combustibles. Anteayer, la Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos y Afines (Cecha) se reunió con representantes de la Secretaría de Energía para informarles sobre el monitoreo. “En general el panorama está tranquilo. Estamos comparando los volúmenes de venta con los de julio, que fue un buen mes. El tema más complicado está con algunas estaciones blancas, que les compran los combustibles a mayoristas, pero son muy puntuales”, indicó Guillermo Lego, gerente de Cecha.
En la entidad igualmente manifestaron su disconformidad con el INTI y la Secretaría de Comercio, por aumentarles 40% el costo del control de los surtidores, cuando a su vez ellos tienen el producto de venta congelado.
Dentro del Gobierno, hoy se llevará adelante una reunión entre el ministro de Hacienda y Energía, Hernán Lacunza; su par de Interior, Rogelio Frigerio, y el secretario de Energía, Gustavo Lopetegui, en la cual se tratarán medidas para normalizar la situación. Entre las alternativas que se barajan se encuentran liberar el mercado del segmento premium de los combustibles o del mercado mayorista, que no afecta a los surtidores, si no a los grandes productores.
Ayer, Lacunza recibió al gobernador de Neuquén, Omar Gutiérrez, y anteayer Frigerio hizo lo mismo con Gastón Remy, CEO de Vista Oil. La empresa que fundó Miguel Galuccio fue una de las que hicieron público su descontento por la medida y anunció que frenaba un equipo de perforación.
Vista y algunas provincias petroleras, como Neuquén y Río Negro, acudieron a la Justicia para declarar inconstitucional la medida.