Desde la cámara marplatense reconocieron que “los números son similares” a los del 2018, un año que se vio marcado por una fuerte baja para la actividad a raíz de la crisis que generó la devaluación.
Desde la Cámara de Expendedores de Mar del Plata aseguraron que la venta de combustibles sigue “deprimida” en los últimos meses, manteniendo la tendencia a la baja que se profundizó a lo largo del año pasado a raíz de la crisis económica.
“Hubo una recuperación en mayo, sobre todo en lo que respecta la gasoil, a partir del empuje de la cosecha del campo, pero después eso no se repitió en junio y las ventas volvieron a caer”, dijo Patricio Delfino, uno de los representantes que tiene la entidad en la ciudad.
En declaraciones a 0223, el integrante de la cámara local insistió en que junio representa un mes de “muy baja actividad económica” y si bien reconoció una “mejora” en el transcurso de julio, con la inyección natural que surge de las vacaciones de invierno, sostuvo que el nivel de comercialización está “bastante deprimido”.
“No se puede hablar casi de una caída porque si se compara con el año pasado son valores muy similares, pero lo que sucede es que esos valores ya tenían una caída importante con respecto al 2017. Como ahora se comparan dos períodos malos entonces no se pueden ver caídas abruptas sino panoramas parecidos”, explicó.
Pese a las bajas ventas, Delfino consideró que el impacto que tiene la crisis económica para el sector no es tan significativo como sí se refleja en otras actividades comerciales e industriales. “El negocio cae en épocas deprimidas pero siempre es menos que en lo que sucede en cualquier otro rubro”, afirmó, y añadió: “Hoy, el negocio está tranquilo y amesetado“.
“Cuando la economía está mal, el consumo de combustible puede bajar entre un 1 o un 5 por ciento, que igual es un montón, pero no baja a la mitad del consumo como sí puede pasar en la venta de electrodomésticos”, ejemplificó, y remarcó: “La actividad tiene mayor grado de regularidad y previsibilidad”.
Fuente: 0223