Las operadoras entregan “Stop Cards” a sus empleados y contratistas que los autoriza a parar cualquier operación si detectan algún riesgo. No importa el cargo, ni la jerarquía. Una herramienta que logró que la seguridad sea parte de las operaciones y no un área aislada.
En cada uno de los procesos de las operaciones en Vaca Muerta y sobre todo los que tienen que ver con la construcción, montaje, perforación y producción existe un nivel de riesgo importante que las compañías intentan disminuir a su menor expresión. Para lograrlo implementan diversas estrategias que suelen ser diferentes, pero comparten filosofías similares. Y una de las herramientas que utilizan para atenuar los peligros son las Tarjetas de Suspensión de tareas.
Las “Stop Cards”, como se las conoce en la industria, son un instrumento muy importante y valorado entre las operadoras queautoriza a cualquier empleado directo o contratista dentro de un yacimiento a detener una tarea si considera que una acción representa algún riesgo para las personas, para las instalaciones o el medio ambiente. En general están firmadas por los directores generales de las compañías y pueden ser utilizadas por cualquier cargo o jerarquía.
Todos los empleados directos la tienen y se le entrega a cada uno de los contratistas una vez que comienzan las operaciones en sus áreas. Varían en tamaño, diseño e inscripciones de un lado y del otro, pero tienen el mismo objetivo.
Hace años que la filosofía con la que se llevan adelante los desarrollos en Vaca Muerta mutó y las operaciones dejaron de medirse por su rapidez o por sus niveles productivos y se empezaron a valorar por los índices de seguridad. En casi todas las compañías la materia se convirtió en un pilar de sus estructuras.
Quiénes la usan
Según consultó “Energía On”, Total Austral, Pan American Energy e YPF son algunas de las operadoras que hacen uso del sistema de tarjetas. Hay otras compañías con desarrollos masivos en la Cuenca Neuquina que también utilizan la herramienta, pero prefirieron mantenerse de manera reservada ante la pregunta de este medio.
En el 2015 el Grupo Total implementó el uso de la Tarjeta de Suspensión para todas sus filiales del mundo y su utilización no implica el riesgo de recibir sanciones. Están firmadas por su director General, Dominique Marion, y en el dorso detalla cómo debe emplearse: una vez que se detecta una acción insegura y se para la actividad, la tarjeta propone que se debe discutir, tomar acción, reiniciar la operación y reportar.
“El valor agregado de la Stop Card radica en lograr cambios en la conducta de seguridad, promoviendo el involucramiento de todo el personal durante las operaciones y mejorando así la vigilancia compartida. Se busca fomentar una actitud participativa a fin de identificar actos o situaciones peligrosas en las que las reglas de Oro de la Seguridad no son cumplidas y, por último, facilitar el abordaje conjunto de las temáticas de seguridad entre los empleados y contratistas”, le dijo a este medio el gerente del Distrito Neuquén de Total, Leandro Marzeniuk.
En YPF la tarjeta también se empezó a utilizar en 2015. “Está alineada a la política de excelencia operacional que tiene la compañía. Se les da a todos los empleados de la compañía y a los contratistas”, expresaron desde la empresa.
Cantidad y tipos de usos
Acorde a lo que averiguó este medio, la gran mayoría de los reportes que se registran por el uso de la tarjeta no son de alto riesgo.Principalmente tienen que ver con detenciones ante el no uso de herramientas de seguridad o cuando una tarea altera el diseño del plan de seguridad de otra.
Desde que comenzaron a implementar el sistema en Total registraron por mes más de 3.000 tarjetas de anomalías entre las operaciones de Neuquén y Tierra del Fuego, donde alrededor del 75% fueron en la Cuenca Neuquina, por las actividades de perforación y completación asociadas al desarrollo no convencional, de las cuales el 20% tienen asociada una Stop Card. Esto significa que aproximadamente 600 actividades son suspendidas momentáneamente por el uso de las tarjetas.
En números
- 600
- son las tareas que se frenan por mes en los activos Total Austral en la Cuenca Neuquina para revaluar los planes de seguridad.
“Esto permite revaluar como se está desarrollando una tarea y repensar diferentes operaciones y enmarcarlas en el proceso de seguridad correspondiente”, explicó Marzeniuk.
En Pan American Energy, desde que se implementó la tarjeta y la política de suspensión de tareas, uno de los índices que mide es la cantidad de veces que se utilizó la herramienta. “Las áreas de Safetytienen mejores estadísticas que las de producción, registran absolutamente todo. Se verifica la cantidad de veces que se utilizó la herramienta. Si en un mes hay pocos reportes, para nosotros significa que se usó poco la herramienta y no que estamos haciendo todo perfecto”, subrayaron desde PAE.
Otras estrategias
También hay otras compañías como Vista Oil&Gas que no utilizan lasStop Cards, pero emplean una lógica de trabajo similar. “Trabajamos con la Autoridad para Detener la Tarea, que es una bajada que viene desde Miguel Galuccio. Esto implica empoderar a los empleados y contratistas para que intervengan de manera inmediata ante cualquier situación que ponga en peligro la seguridad de las personas, el medio ambiente y la integridad de sus activos. A través del programa One Team nuestros objetivos operativos, de seguridad y medio ambiente están alineados con los de nuestras contratistas”, expresaron desde la compañía.
Durante todo el año, las operadoras de la formación realizan capacitaciones, auditorias, recorridas y encuentros entre las diversas áreas de sus compañías y con los contratistas con los que trabajan. Uno de los objetivos de los eventos con las empresas de servicios es trabajar sobre la convivencia de las normas de seguridad entre empresas.
La herramienta que logró que la seguridad trascienda un área
Las Tarjetas de Suspensión de tareas jugaron un papel muy importante para lograr que la seguridad se valore como una parte más de las operaciones y no sea solo materia de un área específica.
Además de su rol, que se puede medir en la práctica, también cumple una función simbólica de empoderamiento del empleado que demostró generar más conciencia, responsabilidad y compromiso, donde la seguridad trasciende los roles y funciones.
Es en este marco que casi todas las políticas de seguridad que tienen alcance a las Stop Cards hablan de “involucramiento” y “responsabilidad compartida”. Pero mientras se convirtió en casi un rol más de cada uno de los empleados y contratistas, las compañías también comenzaron a premiar a cualquiera que haya detectado y frenado una operación posiblemente peligrosa.
En Total Austral desde el año pasado impulsaron los reconocimientos para quienes detectan desvíos significativos para la seguridad.
“Cada mes en cada sitio de la filial se seleccionan algunas iniciativas que son reconocidas y premiadas. Se realiza un reconocimiento mensual local y cada trimestre la iniciativa más significativa es reconocida por los miembros ejecutivos”, expresó el gerente del Distrito Neuquén de Total, Leandro Marzeniuk.
Se hacen comités específicos con la presencia de las más altas autoridades de la compañía y se los reconoce.
“Los riesgos son imposibles de eliminar, es algo con lo que vos tenés que convivir y es importante tenerlo en claro esto. Lo que sí podemos hacer es reducir las posibilidades de que sucedan a su menor expresión y en este escenario entran las tarjetas”, dijo un responsable del área de una petrolera internacional con presencia en la Cuenca Neuquina a este medio.
Fuente: Rionegro